Por Silvie Chavez.
La desdolarización se interpreta como el indicador de la evolución del orden mundial. A medida que estas potencias emergentes fortalecen lazos comerciales y financieros, están cimentando una plataforma para convertirse en líderes del nuevo paradigma económico y político.
Luego de la reciente celebración de la XV edición de la Cumbre BRICS, el escenario mundial que presenta constantes cambios, las dinámicas económicas están siendo redefinidas por alianzas estratégicas en el surgimiento de las nuevas potencias, para la creación de una divisa en este bloque.
Los BRICS han emergido como un bloque económico-político influyente, que desafía la hegemonía económica imperialista. En medio de este panorama, la desdolarización se presenta como una iniciativa significativa que promete no solo un respiro para las naciones involucradas, sino también una declaración de independencia en la era del nuevo orden mundial.
En Johannesburgo, Sudáfrica quedó claro, que el panorama hacia la desdolarización es un hecho, tomando en cuenta que las potencias emergentes se promulgan al unísono en esa medida, que es, el nuevo orden mundial.
En ese sentido Vladimir Putin, presidente de Rusia, apuntó a que esta cumbre del BRICS, juega un papel práctico en la promoción del comercio mutuo e inversiones, sumado al fortalecimiento de lazos de cooperación, así como la ampliación del diálogo directo de las comunidades de empresarios.
"El proceso para el objetivo irreversible de desdolarización de nuestros lazos económicos está ganando fuerza. La proporción de los países del grupo BRICS, con más de 3 mil millones de habitantes, ha alcanzado el 26 % del PIB mundial, y en paridad de poder adquisitivo, el Grupo de los Cinco está superando al Grupo de los Siete: la previsión para 2023 es del 31,5 % frente al 30 %"
El líder uso enfatiza que el BRICS no compite con nadie, ni se opone a nadie, pero está claro en este proceso objetivo de la formación de un nuevo orden mundial. No obstante, manifiesta el mismo tiene opositores irreconciliables, que desean entorpecerlo y contener la creación de centros independientes, para el desarrollo e influencia en el mundo.
"Precisamente desde estas posturas, los países del BRICS enfocan el desarrollo de relaciones multidimensionales con todos los países representados aquí y otros Estados interesados. Destacaría, por supuesto, las cuestiones de la moneda común de pagos"
Al finalizar la jornada de XV edición de la cumbre BRICS, se aprobó por unanimidad el apoyo a la utilización de monedas nacionales en el comercio internacional, así como transacciones financieras, entre miembros y socios del bloque.
Asimismo, el comunicado aduce que las naciones que conforman este bloque económico, acogen con satisfacción el intercambio de experiencias entre los miembros del BRICS, sobre infraestructuras de pago, incluida la interconexión de los sistemas de pago transfronterizos.
“Esto mejorará aún más la cooperación, así como contribuirá a fomentar un diálogo sobre las herramientas de pago para facilitar el comercio y los flujos de inversión entre los miembros del BRICS, así como otros países en desarrollo”
Además, destacaron la importancia en la promoción sobre la utilización de la divisa nacional en países extranjeros, así como transacciones entre los miembros de la organización, instando a que se refuercen las redes bancarias corresponsales, entre los países del BRICS y que se permitan las operaciones en moneda local.
Esta iniciativa no solo promueve la cooperación entre países con visiones y objetivos comunes, sino que también desafía la estructura dominante de poder establecida por décadas a través del imperialismo y sus aliados.
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